El refinamiento contemporáneo y la sabiduría productiva guían la acción de De Sede, una empresa suiza que se dedica a la comercialización de
sofás y sillones de piel. Una producción que mira a las tendencias más modernas, pero sin descuidar la atención a los detalles típica de la tradición artesana. De este encuentro entre pasado y presente nacen soluciones cómodas y elegantes, que conquistan por su sencillez. De hecho, el principal objetivo de la empresa es crear muebles y complementos que satisfagan al cliente no solo en el momento de la compra, sino también a lo largo de los años, muebles que en algunos casos se convierten en auténticos iconos del diseño, como el
DS-600, el sofá modular componible de cuero que, durante más de 45 años, ha representado el estilo de De Sede en el mundo e incluso se ha ganado un lugar en el libro Guinness de los Récords como el sofá más largo del mundo.
De Sede: muebles de cuero desde 1965
La historia de la empresa empezó en un pequeño taller artesano en Klingnau, Suiza. En 1965, la empresa familiar tomó el nombre de De Sede y empezó a registrar sus primeros éxitos comerciales. Las
sillas,
sofás y sillones de cuero hechos a mano fueron apreciados inmediatamente, y la incorporación de modelos cada vez más elegantes no hizo más que aumentar la fama de la marca. A partir de los años 80 se multiplicaron las colaboraciones con diseñadores procedentes de toda Europa, como Reto Rigg, Santiago Calatrava y Mathias Hoffman. En la actualidad, De Sede es una realidad empresarial madura, con más de 140 empleados y que comercializa muebles en más de 40 países de todo el mundo, desde Estados Unidos hasta Rusia, sin olvidar los mercados árabes y los países emergentes. La apertura, en 2018, de una tienda en los prestigiosos almacenes Harrods de Londres marcó la definitiva consagración de una empresa que, a pesar de sus éxitos, permanece firmemente ligada a su filosofía artesanal.
El diseño de De Sede entre sofás, sillones y muebles
La propuesta comercial de De Sede abarca las distintas dimensiones del mobiliario de diseño: de la
zona de noche al
despachos,
restaurantes y lugares públicos. El éxito de la empresa está certificado por los numerosos reconocimientos que los mercados han reservado a sus productos. La
chaise longue DS-1000, diseñada por Ulrich Kössl, es uno de los productos estrella de la casa. Su especial estructura tubular va acompañada por mullidos cojines de piel. Una combinación que fue galardonada con el German Design Award en 2019. El uso del revestimiento de cuero es el común denominador de la oferta de Sede. Todo esto es evidente si se considera la propuesta dedicada al mobiliario para interiores. Desde elegantes
sillones con reposabrazos hasta
pufs o
sofás. Entre los sofás, el modelo DS-840, realizado en colaboración con
Geckeler Michels, presenta una sólida estructura como soporte para los asientos tapizados. La clásica tapicería de cuero confiere la elegancia típica de los productos de la casa suiza. No faltan opciones para la
zona de noche. Por ejemplo, el
DS-1155 proporciona toda la comodidad de un cabecero completamente tapizado y embellecido con aplicaciones de piel.
El
mobiliario para el contract es otra de las áreas de trabajo de De Sede. La
mesita de centro DS-612, diseñada por
Mario Ferrarini, está fabricada con materiales compuestos (composites), y gracias a los distintos colores y alturas, es capaz de adaptarse a los más variados contextos. En cambio, la
mesa DS-777, de
Bruno Fattorini, ofrece una interpretación geométrica y rígida de la encimera, embellecida por elementos de polvo de mármol y fragmentos de metal.
Las propuestas relacionadas con
los asientos son interesantes. Entre ellas destaca la
silla para salas de espera DS-1051, una nueva versión del modelo DS-51 diseñado en 1971. Una creación que sigue vigente hoy en día gracias a las costuras hechas a mano del asiento y el respaldo, un brillante ejemplo del esmero artesanal en los productos De Sede.
Sillas, muebles y complementos hechos a medida: la filosofía de De Sede
El respeto por la materia prima es el fundamento de toda la producción de De Sede. Las creaciones de cuero de la casa se diseñan y luego las elaboran a mano artesanos experimentados, que renuevan constantemente la larga tradición de la marca suiza. Este es el secreto del éxito de la casa, que aun sin dejar de prestar atención a las innovaciones técnicas, opta por permanecer fiel a sus raíces. Esta dimensión artesanal impregna no solo
las sillas y los muebles de De Sede, sino también toda su relación con los clientes. En este sentido, destaca el atento servicio de reparación, que tiene como objetivo restaurar la belleza original de los
sillones y sofás. Esto se debe a que cada producto cuenta una historia, trae consigo inspiraciones y sugerencias que son imposibles de sustituir. En una época basada en el consumo cada vez más rápido e impersonal, De Sede opta por ir en sentido contrario. El mantenimiento de los productos, destinado a prolongar su vida útil, va acompañado de una producción a medida. Una vez más, la empresa suiza se rebela contra la lógica de la producción en masa, ofreciendo un servicio completo de creación de sofás, sillas y complementos personalizados. De esta manera, cada producto es verdaderamente original y además de calidad sobresaliente.
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